Torre de las Minas de Carbón - Casiano de Prado - Llambrión - Torre de la Collada Ancha

DATOS DE LA RUTA

Ruta a la Torre del Llambrión, pasando antes por la Torre de las Minas de Carbón y la de Casiano de Prado. De regreso la Torre de la Collada Ancha, y de nuevo la Vega de Liordes hasta la Horcada de Valcavao.

Altitudes: 2.566m (T. Minas de Carbón)* / 2.613m (T. Casiano de Prado)*/ 2.642m (T. Llambrión) / 2.350m (T. Cda. Ancha)

Distancia: 19.7km

Desnivel: 1.838m

Octubre de 2021

Dificultad: Criterio del 1 al 5 según MIDE "Método de Información de Excursiones"

*toponimia según datos IGN

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VÍDEO Y PERFIL DE LA RUTA EN 3D

MAPA DE LA RUTA

TRACK-GPS

PRÓLOGO

Hoy buscamos alcanzar por segunda vez, la segunda cota más elevada de los Picos de Europa; la Torre del Llambrión, pasando previamente por otras grandes, exigentes y clásicas de Picos de Europa. 

Un "mano a mano" de Cotoya Pindia para el que por fin encontramos el momento.

PUNTO DE INICIO 

La ruta parte del aparcamiento habilitado en la Horcada de Valcavao, a la que accederemos por  pista desde el Puerto de Pandetrave. 

DESCRIPCIÓN DE LA RUTA

Desde la Horcada de Valcabao, iremos buscando el Sedo de Remoña camino de la Vega de Liordes, mientras las primeras luces, se esfuerzan para asomar al Este de los Picos.

Estos momentos, con este silencio y esta luz, nos hacen sentirnos parte del paisaje.

Coronado el sedo, desde el alto de la Canal de Pedavejo, podemos distinguir todas las cotas que hoy recorreremos, marcando en blanco parte de la ida y en amarillo, parte de la vuelta.

El sol ya calienta la caliza de las Minas de Carbón, Casiano de Prado y El Llambrión, a la que no tardaremos en agarrarnos.

Dejamos a nuestra derecha la Vega de Liordes, mientras seguimos el marcado sendero que conduce al Refugio de Collado Jermoso,...

...y que nos hará pasar en pocos metros por el Sedo de La Padiorna.

Desde él, al Oeste, la "Reina del Cornión", se deja broncear por un sol madrugador,...

...Peña Santa, saluda en la distancia.

A nuestra izquierda, desde Salinas al Friero, caliza, sol y sombra en una mañana inmejorable,...

...y a nuestra espalda, se estiran las Peñas de Cifuentes sobre la Vega de Liordes.

El camino está bien marcado y no ofrece por el momento posibilidad de pérdida.

Nuestro siguiente objetivo es alcanzar Las Colladinas, por donde pasa el sendero camino del refugio.

Nuestros objetivos se ven de maravilla, pero escarpados y lejanos por el momento.

Pasamos por debajo de la Torre de las Minas de Carbón, que nos muestra su cara más desafiante camino de Las Colladinas.

Alcanzada la primera de Las Colladinas, El Friero, bien vale una mirada.

Continuamos el sendero hacia la segunda y tercera colladina,...

...desde donde veremos por primera vez el Refugio de Collado Jermoso.

Será en este punto, en la tercera colladina, donde abandonaremos el camino del refugio, para seguir una sucesión de hitos que salen a nuestra derecha, buscando la ascensión hacia la Torre de las Minas.

Vista atrás de la tercera colladina una vez abandonado el camino hacia el refugio.

Los hitos nos harán ganar altura de forma más directa, pero sin exigirnos trepar por el momento.

Cada vez que nos detenemos unos segundos para recuperar el resuello, el paisaje nos cautiva.

📍Nos acercamos a uno de los puntos más técnicos del recorrido, una vertical trepada que marcamos con la línea roja, en la que encontraremos hitos y buenos agarres y que en su parte alta, deberemos abandonar en una corta travesía a la derecha.

La roca es buena y hay buenos agarres,...

...y el paso trasversal es corto, ofreciendo también agarres suficientes.

Vista de la zona de trepada desde la parte alta una vez superado el paso lateral.

Vistas del paso lateral, tras el cual, seguiremos los hitos por terreno más cómodo.

Al salir del paso lateral, veremos como los hitos nos llevan a nuestra derecha (línea blanca), y podremos ver también el camino que seguiremos luego (línea amarilla), para ir de la Torre de las Minas de Carbón a la de Casiano de Prado.

Una mirada al refugio con el paso de trepada marcado en rojo.

Seguimos los hitos y seguimos necesitando por momentos echar las manos en pasos puntuales, mientras buscamos las cresta que nos conduzca a nuestra primera cima.

Ya tenemos a la vista la Torre de las Minas de Carbón, y el sol parece indicarnos el camino a seguir.

La cresta, suficientemente ancha pero con un patio espectacular, nos conducirá sin mayores problemas hasta la cima,...

...teniendo eso sí, que volver a echar las manos en la parte final...

...mientras ladeamos el último espolón.

Coronamos la Torre de las Minas de Carbón y tenemos frente a nosotros nuestros próximos objetivos.

Las vistas son de pájaro en todas direcciones...

...y nos permiten mirar desde el cielo, el camino que más tarde seguiremos para alcanzar la Torre de la Collada Ancha, que será si todo va bien, nuestro último "dosmil" de la jornada.

Pero antes tenemos que llegar al vértice geodésico del Llambrión, que ya nos reta desde la distancia.

Toca abandonar la cumbre,...

...y desandar la aérea cresta.

Un hito nos marcará el punto donde comenzar una travesía hacia un visible colladín, que antes marcábamos con línea amarilla y que no presenta más dificultad que la de prestar atención en cada paso.

Alcanzando el colladín.

Vista desde el colladín, de la travesía que venimos realizando desde el hito que indica su comienzo.

Una vez pasado el colladín, los hitos nos conducirán hacia una pindia canal situada a la derecha,...

...mientras que al frente, tendremos una buena perspectiva de la Torre de La Palanca.

En medio de la canal encontramos un resalte, que en nuestro caso superamos por la derecha, utilizando las manos pero sin grandes problemas.

Poco después de superar el resalte, los hitos nos sacan de la canal por la izquierda,...

...para seguir trepando por una sucesión de terrazas.

...hasta acabar saliendo a una aérea cresta cimera.

Seguiremos progresando por ella hasta alcanzar la cima de Casiano de Prado, con sencillas trepadas, no exentas eso sí, de un considerable patio.

Alcanzada la cima de Casiano de Prado, el terreno se vuelve más amigable y nos permite relajarnos un momento a merced de sus vistas.

Continuamos recorriendo la cuerda camino del Llambrión, guiados en todo momento por hitos,...

...y buscando unas características piedras negras, que no son otra cosa que carbón,...

...y que nos servirán como referencia para regresar tras coronar el Llambrión, ya que aquí comienza el descenso por las marcas amarillas, superando el ya famoso "paso lateral expuesto".

Pasaremos de largo sobre las piedras negras, siguiendo los hitos que conducen al Llambrión.

La parte inicial de este tramo es sencilla,...

...pero no tardaremos en vernos de nuevo concentrados, agarrados a la caliza y porqué no decirlo, ¡disfrutando como niños!.

Encontramos el recorrido bien hitado, y aunque no tiene pasos de gran dificultad, requiere una alta dosis de concentración en todo momento.

En el trayecto de ida, pasamos previamente por la antecima del Llambrión, antes de llegar a la cima principal, para el regreso, cortaremos la antecima por la vertiente que da al refugio. Vistas del Llambrión desde la antecima,...

...y vistas de la antecima desde el Llambrión.

Coronamos por segunda vez la segunda cota más alta de Picos de Europa y disfrutamos del momento.

Regresamos ahora rodeando la antecima...

...y desandando lo andado hasta alcanzar las piedras negras.

📍Allí comenzará el descenso por las marcas amarillas, teniendo que salvar un primer paso lateral expuesto, en el que encontraremos agarres suficientes y que a nuestro juicio, se trata más de un paso psicológico que técnico.

Vista atrás del paso lateral una vez superado. (En nuestro caso, aunque llevábamos un cordino, no vimos necesario usarlo).

Superado el paso, comienza un vertiginoso descenso en el que habrá que prestar de nuevo toda la atención. Aunque pueda dar la sensación de que los mayores problemas ya han pasado, es una zona que en absoluto está exenta de riesgo y en la que la dificultad, dependerá mucho de las condiciones meteorológicas que nos encontremos. 

📍Con roca húmeda, viento fuerte o escasa visibilidad, podrían complicarse mucho las cosas.

En las primeras canales, se encuentran zonas con la roca lavada,...

...y luego iremos alternando algunas zonas de gravera con otras de destrepes.

Los destrepes, aunque con buenos agarres, es posible que nos exijan ponernos de espaldas en más de una ocasión.

Finalmente, las marcas amarillas acabarán por sacarnos al Jou del Llambrión, donde ahora sí, podríamos dar por terminadas las dificultades.

El Jou del Llambrión, es un estupendo lugar para parar a reponer fuerzas y descansar un rato,...

...mientras disfrutamos de las imponentes montañas que nos rodean.

Tras el descanso, seguimos los hitos que nos conducen al camino de Collado Jermoso,...

...y una vez enlazamos con él,...

...ponemos de nuevo rumbo a Las Colladinas.

A medida que vamos recorriendo Las Colladinas, fijamos la mirada en la Torre de la Collada Ancha,...

...a la que finalmente decidimos ir, tomando el desvío que sale desde la primera de Las Colladinas.

Una vez en la Collada Ancha, nos volvemos para ver las torres que hemos recorrido esta mañana,...

...mientras que al suroeste, nos espera otra entretenida trepada hasta alcanzar nuestra última cima.

📍Agarres suficientes pero no generosos y algo más de verticalidad de la que esperábamos para alcanzar la Torre de la Collada Ancha.

Otra cima esta de vistas privilegiadas, como si estuviéramos en un barco, surcando un mar vacío, rodeado de montañas calizas.

Toca destrepar lo trepado y poner rumbo al Sedo de la Padiorna.

Para ello, iremos siguiendo algunos hitos, que por momentos llegamos a perder, buscando descender el Jou del Sedo,...

...mientras dejábamos atrás la Collada Ancha y su torre homónima.

No tardamos en enlazar con el sendero hitado que cruza el jou,...

...y que nos irá conduciendo cómodamente...

...hasta enlazar de nuevo con el señalizado Sedo de la Padiorna.

Sólo queda relajarse y pasear hasta el alto de la Canal de Pedavejo.

Una vez situados bajo Tiro de Pedavejo,...

...decidimos descender de nuevo por donde habíamos subido, por el Sedo de Remoña.

Una vez bajado el sedo, un cómodo paseo hacia la Horcada de Valcavao,...

...donde nos espera el coche, unas frías cervezas y una estupenda sorpresa;...

...encontrarnos con tres montañeros vascos, seguidores de Cotoya Pindia, con los que acabaríamos alargando gratamente la jornada. 

FIN DE JORNADA

CONCLUSIÓN

Se trata de una ruta exigente por distancia, desnivel y dificultad técnica, que requerirá cierta experiencia en montaña y si es posible conocimiento del entorno. Aunque el recorrido más comprometido se encuentra hitado, podría resultar sencillo perder el camino correcto, por lo que conviene llevar la ruta bien estudiada. Así mismo, aunque a priori no sería necesario el uso de cuerda para su realización, si sería recomendable llevar un cordino de al menos 30m para poder salir de un apuro si llegara a producirse. 

Es recomendable realizar esta actividad con condiciones meteorológicas favorables, ya que de lo contrario, la dificultad podría aumentar exponencialmente.